Justo Rodríguez Santiago, Tío Justo, ha fallecido este 2 de enero a causa de la Covid-19, según fuentes próximas a su familia. Tenía 85 años y ha vivido medio siglo en Palma Palmilla.
Desde el Plan Comunitario de Palma Palmilla se destaca que Rodríguez desempeñó un papel de mediación en conflictos surgidos en el barrio. Le gustaba escribir poesía y publicó libros como el titulado “De tal palo tal astilla” y “Rosas sin espinas”, editados por el Ayuntamiento de Málaga. Se le solía ver en una plaza colindante a la calle Cabriel, en La Palma, que tiene desde hace años una placa de homenaje a este vecino.
Uno de los hijos del fallecido es Jesús Rodríguez, Chule, uno de los fundadores del comedor social Er Banco Güeno y promotor de La Casa de la Buena Vida.
Aunque algunos medios de comunicación se refieren a él como “patriarca de Los Charros”, en realidad Rodríguez era lo que se denomina como hombre o tío de respeto, una figura reconocida entre la comunidad gitana que “se va ganando durante toda la vida por su ejemplo, por llevar una vida muy gitana de respeto y honor”, explica Guillermo Carmona, integrante de la Hermandad Gitana.
Existen tanto hombres como mujeres de respeto reconocidos como tales por la población gitana y no es un cargo hereditario, como podría pensarse.
Aproximadamente el 25% de la población de Palma Palmilla es gitana. En todo caso, la figura de tío de respeto de Justo Rodríguez era también reconocida por personas gitanas del resto de Andalucía.